Decimos adiós a Ibáñez. Te debemos montones de risas
Este fin de semana nos ha dejado una de nuestras fuentes de inspiración: Francisco Ibáñez. Uno de los creadores de tebeos más importante de nuestro país y sin el cual, es muy probable que el que firma este artículo hoy, no se hubiera interesado por la lectura en su vida. Yo me crie con Mortadelo y Filemón, ya que mi abuelo, dueño de un puesto de periódicos, me enchufaba estas historias entre «tanto tebeo de superhéroes (de Marvel, por supuesto)». Yo no leía nada, solo veía los «santos» (como los llamaba mi abuela) y con las imágenes ya me hacía una idea de qué iba. Nunca me he reído tanto con una historia como con Mortadelo y Filemón (si descontamos Sin Noticias de Gurb de Eduardo Mendoza, pero esto ya es literatura).
La foto que ilustra esta entrada es de mi historia favorita: La Máquina del Cambiazo, en una de sus miles de ediciones, ya que yo recuerdo leerla dentro de una recopilación de tebeos. Es desternillante a más no poder y altamente recomendable. Ibáñez no solo creó a este par de agentes secretos de lo más tontos e inútiles, sino que tiene más personajes hilarantes en su haber: la 13 Rue del Percebe, Rompetechos (anda que no hay gente por ahí con este mote), El botones sacarino, Pepe Gotera y Otilio (chapuzas a domicilio) y Chita, Tato y Clodoveo (de profesión sin empleo).
Ibáñez nos deja sin haber recibido un premio Príncipe de Asturias
Por desgracia, creo firmemente que si Ibáñez hubiera empezado su obra hoy no existiría Ofelia y todos los gags que hay sobre ese personaje. Esperemos que no censuren su obra, volviéndola más «adaptada a los tiempos que corren» o que la metan en un cajón al no respetar las nuevas sensibilidades. En fin, descanse en paz, señor Ibáñez.
Para acabar, ya que no nos gusta terminar en negativo, tenemos que agradecer a David su reseña de 5 estrellas en Amazon de El Despertar (y que nos haya comprado el libro en digital). No sabemos quién es, y si nos estará leyendo, pero desde aquí le damos las gracias por la confianza depositada en nosotros y en nuestro Ciclo de la Torre Negra. Esperamos tus comentarios en El Poder del Fénix, que seguro que te entusiasmará. A todos los demás, nos volveremos a ver en septiembre. ¡Feliz verano!