Querido diario, como dijo Garci: «Volver a empezar»
Es curioso como los acontecimientos o la vida misma se retuercen y te hacen volver a la casilla de salida una y otra vez. Revisando las entradas de esta página, me he dado cuenta de que hace un año publiqué esto: Habrá nuevo hermano para el Ciclo de la Torre Negra. Pues bien, no solo estoy en el mismo punto que hace un año en lo literario, sino que he vuelto a ese lugar, también, en lo personal. Sí, no tengo trabajo y nada de lo que tenía hace un año se ha solucionado. Toca volver a empezar.
Si bien unas cosas se han cerrado, otras se han abierto para sustituir y quitarme el sueño, a lo que ya se había superado. No os lo vais a creer, porque parece un chiste malo, pero en cuanto escribí que tenía trabajo en la última entrada, que fue publicarla para el 27 de junio, me quedé sin él. El mismo día. Curioso, ¿verdad? Pues así estamos, igual que en 2023.
Volver a empezar es lo que toca en estos casos
No sabéis lo que me gustaría tener algo de paz y poder dedicarle algún tiempo a escribir, pero está claro que las circunstancias siempre están en mi contra. No me rindo, pero cansa, cansa mucho. Por suerte, aproveché para cambiarme de casa, pero este movimiento me ha traído aún más mierda en el corto plazo. Se irá solucionando, pero me toca reclamar, protestar y estar cabreado por los malos profesionales (abogados incluidos) que me encuentro todos los días en este lugar donde vivo.
En fin, con estos mimbres pocas cestas buenas puedo hacer, aunque no cejo en buscar esa paz que me merezco y que está claro que no me dejan alcanzar. Las noticias literarias tendrán que esperar, pero sigo convencido de que ni Martin ni Rothfuss van a sacar la continuación de sus sagas antes de que yo saqué el tercero de lo mío (lo mismo dije con el segundo y acerté). Seguimos en contacto, ciclofans (si es que todavía queda alguien que lea este blog).